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¿Alguna vez se nos ha ocurrido pensar que las enfermedades que padecemos como la alergia, la migraña, las cardiopatías, la gripe, la fibromialgia… entre otras, no son casualidad sino algo que tiene que ver con nuestra manera de pensar, de sentir, de actuar? ¿Nos conocemos a nosotros mismos?
El doctor Edward Bach, investigador bacteriológico, desarrolló hace más de 70 años un método para hacer posible que las personas enfermas pudieran recuperar su salud sin procedimientos desagradables ni un gasto excesivo. En su opinión, la salud es consecuencia de lo positivo del ser humano, de un óptimo crecimiento psíquico y físico, un desarrollo en armonía con la Vida. Insistió en la necesidad de eliminar los bloqueos negativos que configuran nuestra personalidad.
En los años 30, el Dr. Bach, atendiendo a los modos de conducta, clasificó a sus pacientes en treinta y ocho grupos y a sus remedios los dividió en siete grupos. Quería crear un método curativo que se pudiera utilizar sin riesgos y para ello utilizó las esencias de diversas plantas y flores. De ellas 35 son flores naturales y 3 flores lo son de cultivo.
Los tratamientos con Flores de Bach se incluyen dentro de los llamados de Medicina Alternativa, no interfieren en tratamientos de cualquier tipo y se pueden utilizar como ayuda a otras terapias. No tienen contraindicaciones ni efectos secundarios.
EL tratamiento con Flores de Bach, es un método reconocido por la Organización Mundial de la Salud desde el año 1976.
Autora invitada
Cristina Villarroya Villanueva
Enfermera – Naturópata
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1 personas:
Muy interesante Cristina, gracias.
Recuerdo que durante mi trabajo de parto me dieron flores de Bach (pero ahora no recuerdo ni cuáles me dieron ni con qué fin, jejeje).
No conocía su origen, pero me ha recordado a la homeopatía, que es mi "medicina alternativa".
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